La economía local de Baures está sostenida principalmente por el cacao silvestre y su derivado esencial, el chocolate.
El cacao silvestre se diferencia del cacao trasplantado por la calidad de su aroma y sabor.
“Nuestro sueño es una planta para la industrialización del chocolate, que genere empleos los 365 días del año, para los propios hijos del pueblo”, manifestó la autoridad municipal en entrevista con radio Santa Cruz.
Escuche la nota de radio Santa Cruz
El municipio de Baures, supera las 8.000 hectáreas de bosques con Cacao silvestre y ésta representa una de las actividades más importantes para sus pobladores.
Baures es una hermosa ciudad intermedia enclavada en el archipiélago de la llanura amazónica que está bañada por el río Negro, afluente del caudaloso Iténez, nombre que adquiere en Bolivia el Guaporé que se desprende del río Madeira en el Brasil. Se encuentra a 70 kilómetros al sureste de Magdalena, capital de la provincia Iténez del Beni, y a 200 kilómetros al noreste de Trinidad, la capital del departamento.
En el libro “El cacao en Bolivia una alternativa económica de base campesina indígena” de Óscar Bazoberry y Coraly Salazar —citado por la periodista Svetlana Salvatierra en un reportaje publicado por La Razón— se prevé que para el año 2037 “6.000 familias aprovechen 12.115 hectáreas de producción de cacao silvestre y comercialicen 1.672 toneladas métricas, con un valor aproximado de $us 2,7 millones”. Una tonelada de cacao silvestre llega a valer $us 2.500. La industria chocolatera es pues el gran futuro en plena marcha de este noble pueblo tricentenario.
Foto: Cepad