Mediante un comunicado la Coordinadora Nacional de Defensa de Territorios Indígenas Originarios Campesinos y Áreas Protegidas de Bolivia (Contiocap) rechazó la aprehensión de 57 personas en el río Madre de Dios, en Riberalta, porque solo se afecta a los “eslabones más débiles” y no a los verdaderos responsables de la minería ilegal y propietarios de las cooperativas mineras.
A la vez, exigen al Gobierno y a las autoridades competentes realizar una investigación seria para identificar a los verdaderos responsables de la minería ilegal, así como del modus operandi de esta actividad, sobre la que el Gobierno no tiene control, menos sobre la contaminación de los ríos con mercurio y la afectación de los territorios indígenas y áreas protegidas.
Por otra parte, exigen al partido de gobierno que deje de utilizar el discurso de la supuesta “protección” a la Madre Tierra y a los pueblos indígenas; y más bien empiece a generar alternativas de trabajo y sustento para evitar que los jóvenes que viven en áreas de minería del oro abandonen su educación.
Finalmente, pidieron a los organizamos internacionales en defensa de los derechos humanos, como la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) y a la Organización de Naciones Unidas (ONU), que no ignoren ese hecho contra los pueblos indígenas y personas humildes de comunidades que, por su condición de vulnerabilidad, han sido inducidos a ingresar a la minería legal e ilegal del oro.
A propósito, conversamos con Alex Villca Limaco, integrante de Contiocap, que aseguró que las actividades extractivistas, como la minería y otras actividades que se desarrollan en los diversos territorios del país ponen en peligro la existencia de los pueblos indígenas, por lo que hay que “tejer una resistencia que englobe a todo el pueblo boliviano”.
Escuche la entrevista completa.
Foto Ministerio de Gobierno