El jesuita y teólogo Víctor Codina, S.J., se refirió a la creación de la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA) como “ya un ejercicio de sinodalidad que comenzó en el Sínodo Amazónico”.
“En el Sínodo lo más impactante no fue lo que los obispos decían, sino lo que dijeron mujeres y hombres indígenas laicos y religiosas indígenas”, afirmó.
Asimismo, Codina destacó que el aporte eclesial más importante del Sínodo es la creación no de una conferencia episcopal amazónica, como se pedía en el Documento Final, sino la creación, por parte del Papa Francisco, de una Conferencia Eclesial de la Amazonía formada no solo por obispos, sino por clero, vida religiosa y laicos, mayormente indígenas.
“Esto abre un camino para toda la Iglesia universal de ir más allá del estrecho círculo de las Conferencias episcopales, que dejan al margen al clero, vida religiosa y laicado, hay una apertura a todo el pueblo de Dios”, destacó.
En ese sentido, para el teólogo, a la CEAMA le tocará tomar decisiones pastorales de cara a una Iglesia con rostro amazónico, como por ejemplo, crear un rito amazónico, trabajar temas de formación del pueblo, ministros laicales y ordenados, estudiar la posibilidad de dirigentes de comunidad casados y ordenados, diaconado de las mujeres, etc. Estos serían algunos de los de la CEAMA
“Yo creo que todo el proceso sinodal está mostrando una constante bíblica y teológica de la historia de salvación: que el Espíritu actúa desde abajo, que la Iglesia cambia desde la base social y eclesial (…) Es el mismo Espíritu que renueva la Iglesia, ahora no desde los teólogos alemanes avanzados, sino desde los pobres indígenas amazónicos”, enfatizó.
En días pasados, el Papa Francisco instituyó canónicamente la Conferencia Eclesial de la Amazonía (CEAMA), como persona jurídica pública eclesiástica. Se destaca su naturaleza inédita, puesto que se trata de una conferencia eclesial y no solo episcopal.
Por Carmen Julia Luján