Las actividades humanas continúan agravando el deterioro de los humedales pese a la protección que les ofrece el Convenio de Ramsar, de cuya firma se cumple hoy, día mundial de estos ecosistemas húmedos, 50 años.
Esta convención tiene la misión de actuar como un “paraguas” para los humedales, considerados como “los mejores indicadores de calidad ambiental” según han explicado a Efeverde investigadores como Santos Cirujano, del Real Jardín Botánico (RJB-CSIC), quien achaca su declive a “la creciente demanda hídrica de las actividades agrícolas, que consumen el 70 % del agua a nivel mundial”.
irujano ha advertido de que “no hay mucho que celebrar” en este 50 aniversario, pues “la salud de los humedales empeora al mismo ritmo que aumenta la contaminación mundial”, por lo que “es necesario un toque de atención si queremos conservarlos”.
De hecho, para destacar la importancia de estos valiosos pero frágiles espacios naturales, la frase que suscribe Ramsar este año es ‘Agua, humedales y vida’, recuerda este investigador, para quien el convenio es “en realidad, una lista de prestigio” que integra las zonas húmedas más importantes del mundo, pero “sólo funciona si los estados miembros se implican”, porque el tratado “no obliga a que se recupere o conserve un humedal determinado”.
La secretaria general de la Convención Ramsar sobre los Humedales, Martha Rojas Urrego, ha aprovechado este día para recordar que “menos del 1 % del agua del planeta es dulce y en su mayoría está almacenada en humedales”, unos espacios que “acogen al 40 % de las especies del planeta pero desaparecen tres veces más rápido que los bosques”.
EFE Verde.