Aún queda fresco en la memoria el desastre ambiental del 2019, con incendios en Bolivia que fueron calificados como un “ecocidio” y que devastaron millones de hectáreas. Hoy la alerta se activa nuevamente en el país por quemas que ya se han descontrolado en regiones de Santa Cruz y Beni.
Organizaciones, colectivos y pueblos indígenas advierten que de no tomarse medidas inmediatas frente a estos incendios, hay un alto riesgo de repetir los eventos de 2019 y 2020, con quemas que incluso causaron muerte de personas y millones de especies de plantas y animales.
De acuerdo al reporte de la Fundación Amigos de la Naturaleza (FAN), entre los meses de enero y julio de 2021 se han registrado un total de 749 mil hectáreas quemadas en Bolivia.
“Según la evaluación realizada por la FAN (resolución de 20 metros), la mayor superficie quemada se concentra en los meses de junio y julio, mostrando un incremento de 62% en comparación con 2020 y 48% respecto a 2019 para el mismo periodo de análisis (enero a julio)”, detalla este informe.
Nuevamente hay regiones más afectadas por estos eventos, que se acentúan por la época de sequía dura que atraviesa el país y por las normas vigentes que avalan quemas y chaqueos.
Los departamentos de Santa Cruz y Beni concentran el 94% de áreas quemadas; el 75% se concentra en el departamento de Beni y el 18% en el departamento de Santa Cruz. “Hasta finales de julio de 2021 en el departamento de Beni se registraron más de 564 mil hectáreas y en Santa Cruz más de 137 mil hectáreas quemadas”, detalla el documento de la FAN.
Además, del total de áreas quemadas en 2021, el 89% corresponde a superficies quemadas en áreas no boscosas (pasturas, arbusto y herbazales), 8% en áreas de uso agropecuario y 3% en áreas boscosas.
En agosto de 2020, luego de dos audiencias en las que se recibieron y socializaron testimonios de organizaciones, indígenas, activistas, bomberos forestales e instituciones estatales, acerca de los incendios ocurridos en Bolivia el 2019 y sus actuales consecuencias, el Tribunal Internacional por los Derechos de la Naturaleza (TIDN), emitió su sentencia y dictaminó que hubo un ecocidio y entre los responsables se detallaron al gobierno de Jeanine Áñez ya la ex administración de Evo Morales.
“Lo sucedido en la Chiquitanía durante los incendios del 2019 ha sido un ECOCIDIO provocado por autoridades bolivianas (administrativas, judiciales, etc) y el agronegocio», menciona el documento de sentencia.
Los incendios del segundo semestre del 2019 devastaron más de 5 millones de hectáreas y se afectó a cerca de 27 territorios indígenas de tierras bajas y 20 áreas protegidas nacionales y subnacionales.
Además, se responsabilizó de los incendios de ese año a instancias como la gobernación de Santa Cruz, el INRA, la ABT, el Tribunal Agroambiental, y la actual Asamblea Legislativa Plurinacional.
ANF